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0 Comments Escrito por Rodolfo on sábado, mayo 07, 2005 at 10:31 p.m..

Acabo de tener un regreso a mi infancia conectado con el paladar.Mis viejos trajeron del viaje una cajita con tres Cacaolat, una bebida chocolatada divina, envasada, que siempre que uno la toma le quedaba al fondito un poco de cacao y claro uno quería más...quiero más... pero ya no hay el que queda es de mi hermana...demasiado rico... tengo el sabor en la lengua, en la boca y quiero que quede allí largo rato. Recuerdo cuando regresaba de la escuela y nos comiamos un croissants y nos bebiamos un cacaolat o cuando entrabamos a un bar con mis padres y nosotros siempre tomabamos cacaolat y si era invierno...pues lo tomabamos caliente... rico... uuum.