COMUNICADORA SOCIAL vs reportera
3 Comments Escrito por Rodolfo on martes, julio 03, 2007 at 12:52 p.m..
Estoy en un curso de escritura creativa. Oigo el siguiente diálogo:
-¿Tu nombre es? - pregunta la maestra que nos da el curso.
La persona, una mujer jóven le responde pero desde dónde estoy no se le oye.
- ¿Eres periodista verdad?- vuelve a inquerir la experta.
-COMUNICADORA SOCIAL - juraría que lo dijo así, con negritas y mayúsculas.
-Ah, comunicadora social, me corriges.
Yo no pude evitar reirme. Recordándo que quien nos da clases suele presentarse sencillamente como reportera y eso que sin duda es una de las mejores cronistas del país, que sus entrevistas tienes descripciones envidiables y que joder vive de escribir a destajo como ya quisiera yo.
-¿Tu nombre es? - pregunta la maestra que nos da el curso.
La persona, una mujer jóven le responde pero desde dónde estoy no se le oye.
- ¿Eres periodista verdad?- vuelve a inquerir la experta.
-COMUNICADORA SOCIAL - juraría que lo dijo así, con negritas y mayúsculas.
-Ah, comunicadora social, me corriges.
Yo no pude evitar reirme. Recordándo que quien nos da clases suele presentarse sencillamente como reportera y eso que sin duda es una de las mejores cronistas del país, que sus entrevistas tienes descripciones envidiables y que joder vive de escribir a destajo como ya quisiera yo.
Rodolfo:
La pedantería de las palabras es el arte de los acomplejados. Eso es lo que le sucede a la que se hace llamar "comunicadora social". Besos. Te invito a mi blog. Chau
Y bueno sí, y como suele decir la maestra del curso la corrección habla sobre todo de quien lo dice.
Gracías por la invitación por allá pasaré.
pos ni modo, manito… nos toca seguir explicando hasta que alguien entienda alguna vez, que no es lo mismo ni es igual… quizás la ofendida licenciada tenía razón, por aquello de que bajo ese título se cobija un universo tan variopinto como inclasificable que bien podría ser uno Licenciado en Misceláneas, tanto así sirve para describir esa entelequia que en mala hora se le ocurrió a las escuelas del pregrado para justificar ese cajón de sastre académico que son nuestros pensa… docenas de generaciones de egresados y yo sigo sin ver que aquí haya una cosa tal como la Comunicación Social por ningún lado (idem con el Urbanismo, ya que en eso ando)… con todo, te compro la mala leche del comentario porque conozco la anécdota y el contexto: algunos licenciados se sienten menos licenciados si los interpelas por alguna expresión concreta del oficio y no por el grado académico… puede ser por problemas de autoestima o desconocimiento supino del idioma o atavismos que arrastramos de la madre patria que también nos parió con su mal rollo por el trabajo versus la dignidad de los hidalgos que se sientan a pensar… de repente será por eso que aquí cualquier macaco con corbata es “doctor” por obra y gracia de la picaresca criolla, no vaya a ser peor que se nos ofenda el “doctor” si implicamos que el “doctor” trabaja tanto o más que uno, dando por descontado el que nadie sabe nada y menos que piensa algo, porque la “bruteza” nos iguala casi tanto como la brutalidad… siendo entonces llamar “doctor”, en esta crisis perpetua que somos, casi tan insultantemente ladino como llamar a alguien “licenciado”, “veterano” o “poeta” dependiendo del contexto (si me dicen poeta saco la pistola, en serio, tú a mí me respetas gran carajo)… reportero, periodista, cronista, ancla, entrevistador, investigador, analista, comentarista, articulista, moderador, productor, fablistán y hasta persona de medios o generador de contenidos; yo prefiero cualquiera de los anteriores a comunicador, porque de comunicar hasta los teléfonos y los walkie talkies… todo el trabajo honra sobre todo si es honrado.
no es lo mismo ni es igual porque, a veces, depende de la intención: solo hay ofensa si hay ofensor, además de ofendido… cada loca con su tema, allá ella con su miseria mental, si de verdad se ofendió, pues pobrecita la pobre.
Sombras nada más, parole parole parole