Este fin de semana lo pasé casi sin dormir, escribendo a cuatro manos un dossier sobre la juventud venezolana. El tope de entrega era ayer domingo y F. y yo habíamos hablado mucho, recogido información pero no nos habíamos sentado a escribir hasta el sábado. Finalmente lo hicimos con la ayuda de 6 litros de té parmalat, una decena de bombones con café, pastelitos de queso, a media noche una escapada al Centro comercial San Ignacio para ver gente, tomar un mockaccino e inspirarnos un poco y un disco de Los Amigos invisibles que no dejé de poner para no olvidar que "esto es lo que hay".Total que con la ayuda adicional de un disco de Los Fabulosos Cadillacs (la canción "Carnaval toda la vida", en loop) terminamos el texto a eso de las seis de la tarde de ayer domingo. Dos dias completos con la misma ropa, seis versiones distintas de un mismo texto todo para un articulo por el que no me van a pagar ni una locha y que terminará siendo puro prestigio social. Pero ya se sabe, la revista SIC es la revista SIC y los jesuítas son un poder.
¿Qué hay de la juventud venezolana? No sé, no quiero saber nada de ella. Sobre todo porque administrativamente al menos acabo de salir definitivamente de esa etapa el pasado miércoles. Pues ese día cumplí 30 años, que no pude ni celebrar ese día por el montón de trabajo que hay en Transparencia, porque ese día empecé de cinco a diez los miércoles un programa de ampliación en la Universidad Católica, porque al salir de allí,llegue agotado a mi casa a escribir las primeras líneas sobre la bendita juventud y me acosté a las 3 y pico am. Pero tengo que decir que disfrute ese día, en el que el unico escape cumpleañero fue una invitación de C. una compañera de trabajo a un almuerzo en un restaurante de comida española.
La fiestica de celebraciòn cumpleañera fue finalmente el jueves. LUego de mi clase en la católica que ese día es de 5 a 7. Pro primera vez la hice fuera de casa, en la tasca de JUancho que desde fines del año pasado se ha convetido en el punto de encuentro de los amigos. Atienden bien, dan comidita mientras uno toma, lo conocen a uno y me siento a gusto. Hacer la reunioncita en casa siemrpe hubiese resultado más caro y además casi como si hubiese sido en la casa porque al menos seis de las diez mesas del lugar estaban llenas de amigos o conocidos. Luego de medianoche ,bajaron la santamaria del local, no podía entrar más nadie pero nos quedamos allí hasta las tres. Un amigo me llevo hasta la casa.
En el apunte anterior hablaba de la entrevista a Roque Valero, en este debería comentar sobre el trabajo sobre la cultura de la arepa que escribí para CCS. Significó también un trasnocho, con una amiga de complice de ruta para fijarme bien en la gente y lo que hace cuando se zampa una arepa de noche, en la madrugada, al salir de un hotel o quizás luego de un velorio. Pero lo mejor fue sin duda en la mañana de esa noche cuando conversé con evángelicos que venden la arepa bendecida en pleno centro de Caracas. He recibido buenas criticas del texto, aunque a mi lo confieso no me terminó de gustar. Demasiado apoyado en el oficio y en el estilo propio me faltó un poco más profundizar en lo periodístico aunque CCS sea periodismo light.
Los treinta me pegaron un poco, la semana antes del cumple estube algo deprimido, un par de días pensando sobre las conformidades y las inconformidades con uno mismo. La conclusión es que no me puedo quejar, aunque sin duda haya emociones que buscan desbordarse con alguien que aun no encuentro, peor aun, que creí haber encontrado. ¿Qué hace uno cuando se tropieza con alguen con miedo de amar?
¿Qué hay de la juventud venezolana? No sé, no quiero saber nada de ella. Sobre todo porque administrativamente al menos acabo de salir definitivamente de esa etapa el pasado miércoles. Pues ese día cumplí 30 años, que no pude ni celebrar ese día por el montón de trabajo que hay en Transparencia, porque ese día empecé de cinco a diez los miércoles un programa de ampliación en la Universidad Católica, porque al salir de allí,llegue agotado a mi casa a escribir las primeras líneas sobre la bendita juventud y me acosté a las 3 y pico am. Pero tengo que decir que disfrute ese día, en el que el unico escape cumpleañero fue una invitación de C. una compañera de trabajo a un almuerzo en un restaurante de comida española.
La fiestica de celebraciòn cumpleañera fue finalmente el jueves. LUego de mi clase en la católica que ese día es de 5 a 7. Pro primera vez la hice fuera de casa, en la tasca de JUancho que desde fines del año pasado se ha convetido en el punto de encuentro de los amigos. Atienden bien, dan comidita mientras uno toma, lo conocen a uno y me siento a gusto. Hacer la reunioncita en casa siemrpe hubiese resultado más caro y además casi como si hubiese sido en la casa porque al menos seis de las diez mesas del lugar estaban llenas de amigos o conocidos. Luego de medianoche ,bajaron la santamaria del local, no podía entrar más nadie pero nos quedamos allí hasta las tres. Un amigo me llevo hasta la casa.
En el apunte anterior hablaba de la entrevista a Roque Valero, en este debería comentar sobre el trabajo sobre la cultura de la arepa que escribí para CCS. Significó también un trasnocho, con una amiga de complice de ruta para fijarme bien en la gente y lo que hace cuando se zampa una arepa de noche, en la madrugada, al salir de un hotel o quizás luego de un velorio. Pero lo mejor fue sin duda en la mañana de esa noche cuando conversé con evángelicos que venden la arepa bendecida en pleno centro de Caracas. He recibido buenas criticas del texto, aunque a mi lo confieso no me terminó de gustar. Demasiado apoyado en el oficio y en el estilo propio me faltó un poco más profundizar en lo periodístico aunque CCS sea periodismo light.
Los treinta me pegaron un poco, la semana antes del cumple estube algo deprimido, un par de días pensando sobre las conformidades y las inconformidades con uno mismo. La conclusión es que no me puedo quejar, aunque sin duda haya emociones que buscan desbordarse con alguien que aun no encuentro, peor aun, que creí haber encontrado. ¿Qué hace uno cuando se tropieza con alguen con miedo de amar?
Imagino q tratas de amar a esa persona xq la incognita de q si lo hubiese intentado? molesta mas q el estar solo. Ese numero me mete miedo tambien 30, pero q coño! ya llegastes gozatelos! Ahora es q queda de pana... Si yo a mis 26 no aguanto igual los trasnochos, pues imagino q a los 30 tambien es jodio, pero hay mas experiencia, se ha vivido mas y gozatelos y ya! Lastima no los disfrutastes en grande.
Suenan interesantes ambos textos, no tengo acceso a la revista en vivo, sera q los puedo conseguir en internet? Interesado en leerlos.
Caribe! Gracias!
Mi direccion:
http://qtpd.com/caribe
Felicidades atrasadas. Hace 2 semanas cumplí 26 y pensé que mi juventud empezaba a irse. Pero nada más lejos de la realidad! En fin, que aproveches todo lo que te ofrecen los 30...
Indòmita